CAJONERA

Esta cajonera pertenecía al interior de un armario de una habitación de matrimonio. Era de color blanco y no tenía base por lo tanto se tuvo que cortar una base  a medida y se le colocaron cuatro patas para utilizarlo como mueble. Para decorarla se partió del papel que se va ha utilizar en unas de las paredes de la habitación.
La misma idea se puede adaptar a una cómoda vieja o a las que solemos encontrarnos en hipermercados de  aglomerado para montar y darle un aspecto mas personal y adaptarlo a la estancia elegida.

PASO 1
En este caso partimos, como he dicho, del papel que se utilizó para empapelar la pared principal de la habitación. Teníamos dos colores el negro y el plata. Se  puede jugar con los cajones alternando el color, todos los cajones del mismo color y la estructura diferente, hay muchas combinaciones para elegir.

PASO 2.
En este caso se eligió la combinación  de la fotografía, pero el mueble se quedaba bastante soso 
y había que darle un poco de vida.

PASO 3.
Se recortó el dibujo principal del papel y se pegó con cola blanca en la parte central. 
Al ser un poco más grande se acopló al espacio que ocupan los dos cajones centrales.
Ahora viene lo más costoso,  darle todas las capas de barniz que se necesita para que el dibujo pierda el relieve al ser el papel bastante más grueso que el que se utiliza normalmente para la técnica del  decoupage.
Pero el resultado vale la pena, un mueble en este caso una cajonera de armario que se ha convertido en un mueble personalizado e integrado en la habitación.

Los tiradores se pintan del mismo color que cada cajón para que queden disimulados.

Saludos